22 de noviembre de 2014

Rioja Ederra 1947 Blanco

Vino: Rioja Ederra 1947 Blanco
Bodega: Bodegas Bilbaínas (Haro, La Rioja)
Enlace de la bodega: http://www.bodegasbilbainas.com
Denominación de Origen / Zona: D.O.Ca. Rioja
Variedades: 100% viura
Alcohol: 
Elaboración: Uvas procedente en su totalidad de la histórica Finca Zaco. El vino permaneció inicialmente entre 12 y 18 meses en grandes tinos de madera de la época fundacional en los que finalizó las fermentaciones y se estabilizó antes de ser trasegado. Entre 4 y 5 años de crianza en barricas usadas de roble americano de 225 litros y en foudres de diversas capacidades en los que se le aplican diversas trasiegas manuales cada año. Filtrado antes de ser embotellado. Un mínimo de 24 meses de guarda en botellero en los calados de la bodega antes de ser comercializado.

Nota de cata: Espectacular color amarillo pálido, sin llegar al dorado. Cuesta creer que estemos ante un vino dispuesto a alcanzar las 7 décadas de vida sin haber mudado de aspecto. ¿Limpio? No, limpísimo!!! Brillante, refulgente, de aspecto juvenil, sin precipitados. Parece que no ha evolucionado lo más mismo a lo largo de todo este tiempo, sin el más leve signo de oxidación.

Todo lo visto se confirma al abrirlo: franco, amplio, libre de enranciados y de maderas viejas. Inicialmente salen aromas de gran madurez frutal, albaricoque-orejones, membrillo y un matiz cítrico (limón en salmuera, ralladura de pomelo) al que se le suma un fondo apenas mentolado con una pizca de anís y semillas de hinojo. Entero, maduro, reposado. Saca todo tipo de confitura, néctar, miel de romero y una fina nota térrea que envuelve el conjunto. La barrica está oculta en segundo plano aportando un toque vainilla, pimienta blanca y un fino cremoso. Brillante, de grandísima calidad y presencia. Aún tiene pendiente el ir reduciéndose y ganando más matices propios de la edad. Un chaval!!!

En boca tiene tanto temple como nervio, con el punto exacto de tensión y armonía. Faltan adjetivos para ser justos con él. Hay de todo y en cantidad. Su acidez está superpuesta a lo demás, concentrado y ordenado: un poco especiado, un poco salino, un poco cítrico, un poco abocado... La sensación es de plenitud. Nos deja una pincelada de algo que podríamos equiparar a lo "umami" al ir desapareciendo en boca. Última botella de este vino que podría haber ido a mucho más si le hubiéramos dado tiempo. Extraordinario!!!

Nota personal: 99
Nota del grupo de cata: 99
Precio: 180 € 

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